¿Qué es el sueño bifásico? Cómo iniciar un horario de sueño dividido

El sueño bifásico es un patrón de sueño. También puede denominarse sueño bimodal, difásico, segmentado o dividido.

El sueño bifásico se refiere a los hábitos de sueño que implican que una persona duerma durante dos segmentos al día. Dormir durante las horas de la noche y hacer una siesta al mediodía, por ejemplo, sería considerado como sueño bifásico.

La mayoría de las personas son durmientes monofásicos. Los patrones de sueño monofásico implican un solo segmento de sueño, normalmente durante las horas nocturnas. Se cree que la costumbre de dormir un segmento de 6 a 8 horas al día puede haber sido moldeada por la jornada laboral moderna.

El sueño monofásico es típico de la mayoría de la población. Sin embargo, se sabe que los patrones de sueño bifásico e incluso polifásico se manifiestan de forma natural en algunas personas.

 

Sueño bifásico vs. Polifásico: ¿Cuál es la diferencia?

Los términos «sueño segmentado» o «dividido» también pueden referirse al sueño polifásico. El sueño bifásico describe un horario de sueño con dos segmentos. El polifásico es un patrón con más de dos periodos de sueño a lo largo del día.

Las personas pueden optar por un estilo de vida de sueño bifásico o polifásico porque consideran que los hace más productivos. Crea más tiempo para ciertas tareas y actividades durante el día, al tiempo que mantiene los mismos beneficios del sueño monofásico por la noche. También es posible que les resulte más natural.

Las personas pueden seguir de forma voluntaria o natural horarios de sueño bifásicos o polifásicos. Sin embargo, en algunos casos, el sueño polifásico es el resultado de un trastorno del sueño o una discapacidad.

El síndrome de sueño-vigilia irregular es un ejemplo de sueño polifásico. Quienes padecen esta afección tienden a dormirse y despertarse a intervalos dispersos e irregulares. Suelen tener dificultades para sentirse bien descansados y despiertos.

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¿Cuáles son algunos ejemplos de sueño bifásico?

Una persona puede tener un horario de sueño bifásico de un par de maneras. Las siestas son una forma tradicional de describir el sueño bifásico. Son normas culturales en algunas partes del mundo, como España y Grecia.

1.   Siesta corta: se duerme alrededor de 6 horas cada noche, con una siesta de 20 minutos a mitad del día.
2.   Siesta larga: se duerme alrededor de 5 horas cada noche, con una siesta de 1 a 1,5 horas a mitad del día.

En muchas comunidades online, algunas personas informan de que los horarios de sueño bifásicos les funcionan realmente. Dormir la siesta y dividir tu horario de sueño a lo largo del día te ayuda a sentirte más alerta y a hacer más cosas.

 

¿Cuáles son los posibles beneficios del sueño bifásico?

¿Por qué exactamente algunas culturas valoran los patrones de sueño bifásico? Resulta que este estilo de sueño puede ofrecer una serie de ventajas. Entre las más importantes se encuentran: 

• Puede mejorar la función cognitiva. Dormir dos sesiones en un periodo de 24 horas puede mejorar la función cognitiva. Esto puede deberse, en parte, a que reduce la sensación de cansancio y aumenta la capacidad de enfoque y concentración.
• Puede mejorar la productividad. Ciertas investigaciones sugieren que un patrón de sueño bifásico puede aumentar la productividad. Esto se debe en gran medida a la mejora de la función cognitiva descrita anteriormente, así como a un aumento del estado de alerta; juntos, estos dos factores permiten hacer más cosas. Además, este aumento de la productividad no va acompañado de una mayor sensación de cansancio o agotamiento.
• Puede reducir el estrés. La sesión de vigilia nocturna que se practicaba durante los patrones de sueño bifásico de antaño se consideraba muy relajante y una forma importante de controlar el estrés. Es posible que aquellos que desean practicarla ahora disfruten de los mismos beneficios.

Vale la pena apostar por el sueño bifásico

Los horarios de sueño bifásicos ofrecen una alternativa al típico horario monofásico. Muchas personas afirman que el sueño segmentado les funciona de maravilla.

La ciencia, junto con una mirada a los patrones de sueño históricos y ancestrales, muestra que podría haber beneficios. Podría ayudar a hacer más cosas en un día sin comprometer el descanso. Para algunos, puede incluso mejorar la vigilia, el estado de alerta y la función cognitiva.

Sin embargo, todavía no hay investigaciones al respecto. Además, en los estudios realizados hasta ahora se ha observado que todas las personas son diferentes y que los horarios bifásicos pueden no funcionar para todos.

Si te interesa, pruébelo con la aprobación de un médico. Si no mejora la sensación de descanso, lo más inteligente es seguir con el típico horario monofásico que funciona para la mayoría de las personas.

Cambiar el patrón de sueño solo por cambiarlo no merece la pena por el potencial aumento de riesgos en tu salud debido a la falta de sueño y a los patrones de sueño irregulares.

 

 

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