¿Sabías que al comprar almohadas no solo debes fijarte en el tamaño? Se empezó a usar desde hace muchos años. En ese entonces, servían para los mismos fines como hoy en día. Con el tiempo, han mejorado en diseño y comodidad, gracias a la variedad de materiales de relleno que existen actualmente.
Existe una amplia gama de rellenos y cada uno de estos ofrece ventajas únicas. ¿Te gustaría conocer los diferentes tipos de relleno de almohadas que existen? A continuación, te explicaremos los materiales más comunes y famosos para que puedas escoger la mejor opción para ti.
Este material de relleno debe su nombre a su capacidad para adoptar formas alrededor de la cabeza y el cuerpo mientras conserva su forma original. Esto significa que proporciona un gran apoyo y es adecuado para diferentes posturas al dormir.
La espuma de memoria viene en forma de bloque sólido y es uno de los rellenos de almohada más duraderos que se puede encontrar. Por otra parte, otra ventaja de las almohadas viscoelásticas es su facilidad de mantenimiento. Su funda de punto es extraíble, lavable y cuenta con tratamiento antiácaros.
Esta es otra opción muy popular por su excelente soporte. Suelen estar disponibles en forma de bloque sólido, lo que impide su plegado. No obstante, este no es el caso cuando se presentan en forma triturada.
Los materiales de las almohadas de látex se elaboran con goma natural extraída de árboles cultivados en plantaciones tropicales de caucho. Existen muchas ventajas del látex natural. En primer lugar, es respetuoso con el medio ambiente y puede reciclarse fácilmente. También es resistente al moho, los insectos y el fuego.
Asimismo, es bueno para los dolores de cuello y espalda, y si sufres de alergias, puede ayudarte a controlarlas. Sin embargo, algunas personas prefieren otros materiales porque el látex tiene una suavidad poco consistente.
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Las plumas se consideran la alternativa más barata, en gran medida porque poseen propiedades similares, aunque ofrecen menor comodidad y durabilidad. En general, este tipo de almohadas se componen de plumas de ganso, y en algunos casos se complementan con plumón para mejorar la suavidad.
Las ventajas de las almohadas de pluma son la suavidad y la ligereza. También son moldeables y, al dormir, distribuyen el calor de forma uniforme para ayudar a mantener una buena temperatura. Además, las plumas son ecológicas y, por tanto, reciclables.
Si eres hipersensible o propenso a las alergias, las plumas pueden no ser para ti. De hecho, tienen fama de perder rápidamente su forma porque se alinean y se aplastan durante el uso. Otro aspecto negativo es que desprenden un mal olor, por lo que es mejor lavarlas con mayor frecuencia.
El poliéster es uno de los rellenos de almohada más asequibles que puedes encontrar. Este material está hecho de una combinación de pequeñas fibras de poliéster hechas por el hombre. Su rendimiento es similar al de las almohadas de plumas, por ello es suave y ligero.
La limpieza del poliéster también es muy sencilla, convirtiéndolo en el favorito de muchos. El nivel de soporte que proporciona es relativamente decente y puedes encontrarlo en diferentes grados de firmeza.
Una desventaja es que el poliéster no es transpirable. En otras palabras, no es un buen distribuidor de calor. En cambio, atrapa el calor y provoca que la almohada se caliente, lo que puede resultar incómodo al dormir.
El relleno de gel utiliza microperlas de gel con otros materiales como la espuma viscoelástica y el látex para formar una capa adicional de comodidad. Las almohadas memory gel se caracterizan por ser suaves, aunque el nivel varía según la cantidad de gel utilizado.
También son conocidas por su excepcional frescura. Esto se debe a que permiten la circulación del aire, ayudando a la almohada en la regulación de la temperatura. De igual manera, se mantiene durante mucho tiempo y puede ser usada por diferentes tipos de personas. La comodidad es asombrosa y pueden ayudar a disipar el insomnio por el calor.
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El algodón es común por su disponibilidad natural. Eso lo convierte en un buen relleno para ti y para el medio ambiente. Del mismo modo, es un relleno transpirable y cómodo que puedes lavar muy fácilmente en la lavadora.
Aunque el algodón es muy suave al principio, sigue formando grumos después de un uso prolongado y frecuente. Por esta razón, algunos fabricantes de almohadas optan por combinar el relleno con poliéster sintético para aumentar su durabilidad.
Si aún te preguntas cuál es el mejor relleno de almohada, la respuesta depende de tus necesidades específicas. La mejor elección varía según tu postura al dormir, tu temperatura corporal y tus preferencias de firmeza.
Ahora ya sabes cuáles son los rellenos de almohada más comunes y cómodos. Recuerda que elegir el material adecuado puede marcar la diferencia entre una buena noche de sueño y una siesta agitada.
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