Las personas mientras dormimos en un colchón cómodo pasamos por diferentes periodos que han sido delimitados por los médicos con la finalidad de estudiar el sueño, sus características y poder orientar su tratamiento posterior.
Según David Lira, Jefe del Laboratorio de sueño del Instituto Peruano de Neurociencias, la American Academy of Sleep Medicine (AASM) ha definido la presencia de 4 fases de sueño: la I y II, que se presentan al inicio y que son parte del sueño superficial, y la fase III y el sueño REM o de movimiento rápido de los ojos; estas dos últimas fases conforman el sueño profundo, que para que sea reparador debe de ser de alrededor del 60 – 70% del sueño total.
De acuerdo a la web sleep.org el ciclo de sueño de un adulto sano consta de cuatro etapas distintas tal y como lo comenta el doctor Lira. Las tres primeras etapas se consideran sueño sin movimientos oculares rápidos (NREM), y la última etapa se considera sueño con movimientos oculares rápidos (REM).
NREM 1: La primera etapa significa la transición entre la vigilia y el sueño. El NREM consiste en un sueño ligero caracterizado por una reducción gradual de los latidos del corazón, la frecuencia respiratoria, los movimientos oculares y la actividad de las ondas cerebrales. Los músculos también empiezan a relajarse, aunque pueden sufrir sacudidas, movimientos conocidos como sacudidas hipnóticas o arranques de sueño. Esta etapa suele durar varios minutos.
NREM 2: La segunda etapa también consiste en un sueño ligero, aunque los latidos del corazón, la frecuencia respiratoria, los movimientos oculares y la actividad de las ondas cerebrales descenderán a niveles más bajos que durante la NREM 1. Tu temperatura corporal también disminuirá significativamente y los movimientos oculares cesarán por completo. La fase NREM 2 es la más larga de las cuatro etapas del sueño.
NREM 3: Esta etapa marca el comienzo del sueño de ondas lentas o profundas. Los latidos del corazón, la frecuencia respiratoria y la actividad de las ondas cerebrales disminuirán hasta sus niveles más bajos posibles y los músculos se relajarán por completo. La NREM 3 es una etapa más larga cuando se duerme por primera vez, pero se acorta gradualmente a lo largo de la noche. Históricamente, los expertos en sueño creían que el ciclo de sueño también incluía una segunda etapa de ondas lentas conocida como NREM 4, pero la nomenclatura actual combina las dos etapas de ondas lentas en una sola etapa (NREM 3).
REM: La última etapa del ciclo de sueño se produce por primera vez una hora y media después de que te hayas dormido. Como su nombre indica, los ojos se mueven erráticamente bajo los párpados y las ondas cerebrales se vuelven más activas. La frecuencia respiratoria también aumenta, y el ritmo cardíaco y la presión arterial se elevan a niveles más cercanos a los de los periodos de vigilia. Durante esta fase también se producen principalmente sueños, y los músculos se paralizan temporalmente; este mecanismo corporal impide responder físicamente a los sueños.
En general, cada ciclo de sueño suele durar entre 90 y 120 minutos. La duración de cada etapa depende en gran medida de la edad, ya que las personas pasan menos tiempo en el sueño REM a medida que envejecen.
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Sólo pueden medirse las fases de sueño mediante un estudio llamado polisomnografía, que se realiza a lo largo de toda una noche en un ambiente especial, denominado laboratorio de sueño, colocando una serie de electrodos, bandas y sensores a lo largo del cuerpo.
Estas cuatro fases de sueño se van sucediendo consecutivamente una después de otra a lo largo de toda la noche a través de ciclos de sueño, siendo un ciclo de sueño un periodo de tiempo variable que puede durar de 40 a 120 minutos aproximadamente, en que se suceden las 4 fases de sueño hasta comenzar un nuevo ciclo, la representación gráfica del sueño se denomina hipnograma.
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Según Lira, es importante conocer las fases de sueño en una persona, debido a que durante el sueño profundo, es decir en la fase III y el sueño REM, se realiza el verdadero descanso de la persona que duerme, así como se realizan los procesos de consolidación de la memoria y regeneración del sistema inmunológico; por lo tanto aunque una persona duerma más de 8 horas, si el sueño que presenta es en su mayoría superficial, no descansará de manera adecuada y amanecerá cansado al día siguiente.
Para que el sueño de las personas sea profundo, y por lo tanto de buena calidad, debe evitarse el fraccionamiento de los ciclos de sueño, para lo que debe de seguirse una rutina para que la hora de acostarse y levantarse sea la misma, que se destine un número adecuado de horas para dormir, que las horas de sueño no sean perturbadas por ruidos ni otras actividades, así como cuidar que el dormitorio y la cama sean cómodos.
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